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Acciones de empresas automotrices caen por aranceles de Trump
La política de Donald Trump de fabricar automóviles al interior de Estados Unidos afectaron el ánimo de los inversionistas de las armadoras.

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Las acciones de las empresas automotrices que cotizan en Bolsa caen desde que Donald Trump se convirtió en presidente de Estados Unidos, el pasado 20 de enero y tras imponer aranceles de 25% a los autos y autopartes importadas al mercado estadounidense, así como al acero y al aluminio, material fundamental del sector.
Los títulos del fabricante de automóviles Stellantis NV, fusión de Fiat y Chrysler, son los de peor desempeño, con una caida de 30.97% a 8.67 dólares, del 20 de enero al 6 de junio. En segundo lugar está la fabricante de autos eléctricos, Tesla, con una pérdida de 30.80% para cotizar en 295.14 dólares.
Las acciones de la compañía que fabrica automóviles, camiones y motores, General Motors (GM), bajaron 6.87% a 47.47 dólares por unidad.
En Europa, las acciones de la alemana Mercedes-Benz, perdieron 6.79% a 51.35 euros y las del fabricante alemán de automóviles y motocicletas de alta gama, BMV, cayeron 0.54% a 76.78 euros.
Las acciones de la automotriz de origen estadounidense, Ford, avanzan 2.40% a 10.26 dólares por unidad, porque el 80% de su producción se realiza en ese país.
Los expertos de Monex, Casa de Bolsa, resaltaron en un estudio que la industria automotriz global está enfrentando una serie de riesgos para el comercio y las cadenas de suministros establecidas.
Bajo esta coyuntura de amenazas y aranceles, “consideramos que el balance de riesgos para el crecimiento en la actividad de la industria automotriz presenta un sesgo a la baja, atribuido a las políticas proteccionistas de Estados Unidos, que repercuten en la estrecha interdependencia de las cadenas de suministro; y particularmente por la desaceleración de la economía”, explicaron.
Prevén que será fundamental que las negociaciones con Estados Unidos, “referentes a la reducción del arancel de 25% para automóviles y autopartes se consolide por tiempo definitivo, a fin de garantizar las ventajas comparativas de México”.
El área de Análisis de Scotiabank destacó que a finales de abril y mayo en Estados Unidos se revisaron las políticas para limitar el impacto de los aranceles en su economía.
En Estados Unidos se eliminó el efecto de acumulación de múltiples aranceles de modo que se aplicara una tasa arancelaria en lugar de una combinada. Además, se presentó un programa de reembolsos equivalente al 3.75% del precio de venta para autos producidos en esa nación.
“Además, Estados Unidos suspendió durante dos años los aranceles del 25% sobre las importaciones de autopartes que cumplen con el T-MEC procedentes de Canadá y México, cuya entrada en vigor estaba prevista para el 3 de mayo”, se lee en el análisis del banco.
“Si bien estos ajustes suponen un cierto alivio para el sector automotriz en comparación con lo anunciado previamente, persiste una gran incertidumbre sobre los acontecimientos futuros y el posible impacto en las cadenas de suministro automotrices de América del Norte”, escribió el analista John Fanjoy.
Destacó que las previsiones para las ventas que autos en Estados Unidos, que se han desacelerado son de 16 millones de autos en el 2025 y 15.8 millones en el 2026.
“Pero se enfrentan a una gran incertidumbre, ya que los aranceles impuestos a una amplia gama de bienes importados a Estados Unidos lastran las perspectivas económicas”, destacó.
Pérdida competitiva
Analistas de Banamex, aseguraron en un estudio que el golpe arancelario del mercado estadounidense será menor que en otros países, aunque México perderá competitividad frente a los productores de Estados Unidos.
“La mitad de autos vendidos en Estados Unidos son importaciones y la otra mitad son producidos localmente. Podemos suponer que, además de traspasarse a precios al consumidor la mayor parte de los aranceles, es probable que las importaciones de autos de otros países se intenten sustituir por producción local, antes que las provenientes de México y Canadá”, aseguraron.
Añadieron que “México perdería muchas inversiones que serían dirigidas al vecino del norte de mantenerse la política arancelaria de Trump, “ante la evidencia de que será negativo para el consumidor americano y para la eficiencia de la manufactura de ese país”.
En Estados Unidos, Donald Trump propuso ayuda a los ciudadanos que adquirieran autos producidos en aquella nación, además de los aranceles impuestos a la importación de autos de otras latitudes, sobre todo de China.
